Entrevista Morgan: «Aunque hagamos mucha melodía, nuestra filosofía de vida es muy rock, lo que nosotros entendemos como rock, no solo musicalmente sino de vida» (Nina).

Morgan se han convertido en uno de los grupos más representativos de nuestro país a base de talento y naturalidad. Con dos discos publicados hasta la fecha, “North” (2016) y “Air” (2018), se han hecho un hueco en la actual escena musical, con el valor añadido de haberlo conseguido por sí solos, sin ningún apoyo externo, basándose en el boca a boca y en la abrumadora calidad de su propuesta. De forma natural y casi sin proponérselo, Morgan han sabido conectar con un público ávido de música real y llena de vida. Gran parte de culpa de su éxito le corresponde, sin duda, a Carolina de Juan, Nina, su cantante y compositora, que representa perfectamente qué es Morgan. De una dulzura y una candidez contagiosa, Nina ha conseguido elevar con su voz y su fuerza unas canciones que rezuman belleza en sus melodías y fuerza vital en su música. Canciones como “Sargento de hierro” ya pertenecen al imaginario colectivo de este país como una de esas composiciones sobrecogedoras que sobrepasan al propio grupo. Morgan son, sin duda, uno de esos grupos que te atrapan sin que te des cuenta, y cuanto lo haces, no quieres que te suelte. Los grandes medios y las grandes productoras ponen su atención en programas de tv y en músicos de usar y tirar sin darse cuenta que el talento de verdad pasa a su lado desbocado y directo al alma. Javistone pudo hablar largo y tendido con la encantadora Nina.

Acabáis de terminar de girar, ¿cómo ha ido? Creo que paráis por una temporada para pensar ya en el siguiente disco.
Bueno, todavía quedan tres bolos así que aún tenemos la adrenalina del directo, aún estamos con el chip de los conciertos, de la emoción que estamos sintiendo con el final de la gira. El día que termine sí está claro que me voy a sentir de manera distinta porque vamos a explotar de tanta emoción acumulada, podremos coger perspectiva de todo lo que hemos hecho y ver que todo esto que hemos vivido ha sido real. Lo que te puedo decir a día de hoy es que está siendo alucinante, la verdad. Si la vida de los dos discos que hemos sacado ya de por sí ha sido más que digna, maravillosa, este último tramo de la gira está siendo brutal porque creo que toda la gente que viene a vernos siente la emoción que sentimos nosotros y recorre el viaje que hacemos durante el concierto con nosotros… y nos da mucho cariño. Así que imagínate, nos sentimos muy bien y muy agradecidos.

Me gustaría hablar un poco sobre la historia de la banda. Parece que Morgan es una banda ya consagrada, pero realmente solo tenéis apenas cinco años…
Así es. Y además fue algo casual. Yo tenía otros planes y no contaba con cantar ni sacar mis temas al público. Yo cantaba con Paco en su grupo, como corista. Por lo que a mí respecta siempre había cantado y tocaba el piano en mi casa, con unas cuantas ideas rondando en mi cabeza, pero vamos… era para tocar en reuniones familiares y poco más. Y bueno, un día que me sentía bien le enseñé a Paco algunas ideas que tenía compuestas. Como le gustaron bastante se las enseñó a Ekain y entre los dos me propusieron que si queríamos entrar los tres en el local, montar los temas y trabajar en ellos, ver cómo podían desarrollarse. Y así estuvimos casi tres años en el local, sin hacer bolos, sin hacer nada… solo por el placer de tocar juntos y pasarlo bien.

¿Cuáles eran tus referentes? ¿Qué artistas hicieron que quisieras cantar y escribir?
La verdad es que un poco de todo, porque como nunca he tenido filtro mis gustos son muy amplios, todo me parece bien, en general. Y cuando algo me dice algo me da igual de qué estilo sea. Pero claro, en mi casa de pequeña había muchos discos de Lynyrd Skynyrd, Eagles, Allman Brothers… luego cosas más modernas, The Black Crowes, Aerosmith… Luego cuando fui creciendo también escudaba cosas que me correspondían más por edad, Christina Aguilera, las Spice Girls… un poco de todo, como te digo. Luego a mi hermana le robaba discos y ella escuchaba a Fiona Apple, cosas más rockeras… o Aretha Franklin, Etta James… Después al ir creciendo me fui por otros derroteros con gente como Florence Against The Machine y otras chicas que me encantaba escuchar y hacia que me apeteciera a mi cantar. Pero muchos estilos, mis gustos abarcan muchos estilos. A mí es que me estimula mucho la música, me gusta en general así que me quedo con las cosas que me dan gusto en el alma.

Lo de Morgan de dónde viene, creo que era un apodo que tenías…
Sí, pero bueno… Lo de ponerle nombre a una banda es algo que no le deseo a nadie (Risas). Porque es muy difícil, no sabes cómo ponerlo. El nombre en realidad se va haciendo a sí mismo a medida que pasa el tiempo, ¿no? En el momento en que se lo pones, prácticamente no tiene ningún significado… pero sí, estábamos tirando ideas y a mí se me ocurrió ese y nos pareció bien, no es ni nombre personal de nadie de los cinco, no era de chico o chica, ni apellido… se puede decir en cualquier idioma… En realidad sucedió que teníamos un concierto y había que poner algo en el cartel (Risas).

Desde el principio, que comenzasteis a tocar, tuvisteis muy buena aceptación y el boca a boca en Madrid funcionó mucho… ¿a qué crees que se debía?
Creo que a día de hoy seguimos sin ser conscientes de qué es lo que pudo pasar. Pudieron ser muchos factores, como que Paco o Ekain llevaban mucho tiempo tocando en bandas. Luego das un concierto y vienen a verte tus amigos, luego ellos hablan con otros amigos y el boca-oreja termina haciéndose grande sin saber nosotros muy bien por qué. Nosotros confiábamos, y seguimos haciéndolo, en nuestras canciones, pero tampoco esperábamos nada.

No teníais aspiraciones, fue todo un proceso muy natural.
Sí, ya te digo que fue muy sorprendente. Tú mismo lo comprendes, fue algo que cuando pasa no sabes muy bien por qué. También te digo que nosotros, desde el principio, hemos tenido claro que nuestra filosofía era de puertas para adentro, es decir: si estamos a gusto con lo que hacemos da igual lo que se piense fuera. Nosotros hemos quedado a tocar a las cinco y eso es lo que nos gusta y nos hace felices. Y por suerte aquello llegó a conectar y esa conexión… no queremos ni pensar por qué se dio porque igual el día que consigamos entenderlo igual se jode todo.

Quizá lo racionalizas y se pierde la magia.
Sí, sí… Al final intentamos de puertas hacia dentro que esto siga teniendo sentido para nosotros y tiene sentido porque lo disfrutamos. SI no, no haría falta salir a tocar.

Vivimos muy agradecidos constantemente porque se haya abierto la mente de las personas que se han acercado a vernos y hayan abrazado nuestra música. Porque es como tú dices, en inglés, de entrada… es como ponerle obstáculos. Pero sí es cierto que uno iría que te estamos poniendo problemas para que te gustemos.

A colación de lo que dices, yo que no he podido veros en directo, hoy mismo estaba viendo el video de un concierto que disteis en San Sebastián y la verdad es que, esa filosofía que dices que tenéis de puertas para adentro de disfrutar de lo que hacéis, creo que lo transmitís muy bien, se os ve disfrutar, parecéis en ese sentido un libro abierto. No todos los grupos son así.
Nos lo dicen mucho después de los conciertos. Veros sonreír, reír, hacer chascarrillos, ver cómo nos queréis musicalmente hace que nosotros sintamos ese sentimiento, de forma que es fácil que se produzca esa relación del público con nosotros.

Luego cuando publicasteis “North” tuvo buena acogida de crítica y público, algo que no suele suceder. Y además (salvo una canción) cantando en inglés… eso tiene mucho mérito, España es un país complicado para triunfar para los músicos de aquí que cantan en inglés. “North” me gusta mucho, me parece un disco muy profundo para gente tan joven, muy maduro además para lo que era un primer disco, con mucho sentimiento, muy bien producido… y con grandes canciones.
Ay qué bien, muchas gracias.

Lo tenía todo para triunfar, pero… eso no significa que suceda. De hecho lo normal es que no suceda.
No, no… de eso somos muy conscientes y vivimos muy agradecidos constantemente porque se haya abierto la mente de las personas que se han acercado a vernos y hayan abrazado nuestra música. Porque es como tú dices, en inglés, de entrada… es como ponerle obstáculos. Pero sí es cierto que uno iría que te estamos poniendo problemas para que te gustemos. Pues oye, se agradece que la gente ponga de su parte para aceptarlo e intentar comprenderlo y conectar con ello. Por eso yo, que soy consciente de que soy muy pesada dando las gracias, y sé que a veces me explayo mucho explicándolo, es importante hacer entender a la gente que viene a vernos lo feliz que nos hace comprobar cómo hacen un esfuerzo en comprar un disco o una entrada para venir a darle cariño a lo que hacemos. Me parece brutal… brutal.

¿Cómo definiríais vuestro sonido?
En cuanto a estilo no sabría decirte. Siempre lo he definido un poco como pop-rock con tintes de muchos géneros allegados al pop y al rock. Luego creo que nuestro estilo es intenso, está cargado de algo, de energía, de algún tipo de energía positiva. Bueno, no sé (Risas). Es que es muy difícil para mí definirlo. Si es verdad que al haber tenido tanta suerte de haber podido tocar tanto que creo que nuestro sonido se ha asentado mucho. Nosotros cinco conectamos mucho sin necesidad de hablar, nos entendemos muy bien.

El 99% de tus gustos musicales son en inglés, ¿cuáles serían tus referentes a día de hoy? Una de tus grandes referencias es Florence and The Machine. ¿Qué nos recomendarías de ella?
Pues tiene varios discos pero yo te recomendaría el “Ceremonials” que es un muy buen resumen de lo que ha hecho, tanto de lo que hizo antes como lo que hace ahora. Ahí encontró algo con lo que yo conecté muy rápido, tiene temazos increíbles, la producción, las melodías, los coros… esa mujer me apasiona. Me ha abierto mucho escucharla.

Llegó un momento en que sentiste que tenías que investigar un poco a la música en español. ¿Qué descubriste que te llamase la atención?
Yo cuando era adolescente, como la mayoría de la gente joven, escuchaba mucho a Extremoduro, que también me abrió mucho la mente. También me gustaba mucho Quique González, Fito… Conecté con Ojos de brujo, Amparanoia

Foto de Juan Pérez-Fajardo

Me has citado a Quique González, que fue una persona importante, os ayudó a daros un poco más a conocer, ¿no? Yo de hecho supe de ti, y por extensión de vosotros, al escuchar su disco “Me mata si me necesita” y me quedé pilladísimo con “Charo”, la canción en la que colaboras y sentí una irrefrenable necesidad de saber quién era aquella chica con aquella voz tan increíble… Cuéntame cómo lo conociste…
Yo estaba fuera de España, llevaba como un mes en Liverpool y de repente me avisan que Quique estaba buscando una voz femenina para que cantase en “Charo” y me tuve que volver a Madrid. Ellos estaban grabando en Tarragona, creo… Yo grabé a distancia lo que creía que sería una prueba, para que él lo escuchase luego y dijese algo. Hablamos por teléfono para saber qué era lo que buscaba, que quería que hiciera. Y bueno, quedó tan bien que cuando lo enviamos me dijeron que se quedaba así como estaba, que era maravilloso y que les había encantado. Tú piensa que yo, al principio, cantaba muy poco en castellano, tenía muchas dudas sobre si lo estaba haciendo bien, si estaba sonando bien, si estaba dando la visión que él buscaba para ese tema. Así que imagínate la ilusión que me hizo que le gustase tanto. A partir de ahí fue todo maravilloso, en Madrid nos conocimos en persona…

Fue casi por casualidad, ¿no?
Sí, sí (Risas). Estaba en un bar y de repente me lo presentan y él no sabía quién era yo, “oye que es Nina”, ah, bien… no sabía quién era yo… (Risas). Luego ya se lo dije y muy bien, estuvimos hablando esa noche. Estaba presentando el disco y me llamó cuando iba a presentarlo en Madrid. Fui la primera vez y claro aquello ya fue una experiencia increíble. Después de eso decidió que quería integrarme en la banda como corista. No te lo puedes imaginar, fue una cosa muy bonita, muy inesperada… maravillosa.

Lo cierto es que sí, porque ¿cuánto tiempo llevabas cantando? ¿Dos años solo?
Sí, sí… muy poco. Por eso digo que fue todo muy excitante y tenía tantas dudas de si sería capaz de hacerlo o no… pero me dije que sí, que si confiaban en mi sería porque podía salir algo bonito de ahí.

Volviendo a Morgan, después de publicar el disco os fuisteis de gira fuera de España, ¿por dónde girasteis? ¿Qué acogida tuvisteis?
Hemos salido varias veces. Fuimos a Sao Paulo, que fue una experiencia brutal. Londres, un par de veces, en Dublín… y poco más. La verdad es que no te creas que hayamos salido mucho más.

En 2018 grabasteis “Air”, ¿qué diferencias hubo entre un disco y otro? ¿Cómo crees que evolucionasteis?
Bueno, la principal diferencia es que, como te decía antes, las canciones de “North” se cocinaron durante varios años antes trabajándolas en el local nosotros tres con el bajista que teníamos entonces. Hicimos el disco, para lo que llamamos a David y a Alejandro con la idea de que grabaran el disco, pero no habían estado en el proceso de composición y de arreglar los temas. Ellos no participaron en la fase creativa de ese disco y en “Air” ya sí, porque éramos los cinco ya como banda y eso se nota, ellos están ahí. “Air” es una continuación de “North” pero con los criterios de Alejandro y David.

Hay una evolución muy natural de un disco a otro.
Sí, creo que esa es la clave, es una evolución.

Me imagino que os lo habrán dicho ya, pero vuestras canciones tienen una intensidad y una belleza que casi duelen, yo te reconozco que cada vez que escucho “Sargento de hierro” se me caen dos lágrimas, no puedo evitarlo (Risas). Cada vez que te escucho diciendo lo de “salvadlos a ellos” se me encoge el estómago. Mi hija mayor cuando salta la canción me dice “papá, qué te pasa” y bueno, que me emociono.
Jo, qué bonito…

¿Hay alguna canción de la que te sientas especialmente orgullosa?
A ver, yo las quiero todas por igual. Como yo de entrada no esperaba que salieran adelante, comprobar que lo han hecho y que gustan, pues me da mucho gusto. Del primero disco “Home” tiene una carga emocional importante para mí. De “Good by” también estoy súper orgullosa. Del segundo disco “The child”, por ejemplo. “Volver”, “Sargento”… la verdad es que se me hace difícil elegir.

Con “Air” ya os terminasteis de dar a conocer a un público mayor, ganasteis varios premios en los Premios de la Música Independiente… incluso tocasteis en un sitio como el Azkena Rock Festival en Vitoria, que no parece a priori el sitio más acorde con vuestra música pero triunfasteis. Todos mis amigos que fueron y no os conocían quedaron encantados con vuestra actuación, típicos rockeros barbones… (Risas).
Joder, sí… fue uno de los más potentes. Ese concierto lo recuerdo yo con mucho cariño, mucha fuerza. Claro que el entorno en el que estás ayuda, y te acompaña. Que tú salgas y el público ya de entrada esté de pie y de primeras abrace lo que estás haciendo, eso es muy chulo. El Azkena ha sido muy brutal. Nosotros teníamos muchas ganas porque somos muy fan del festival y claro se juntan muchos factores, el ambiente brutal, nuestras ganas…

A mí me llama mucho la atención que siendo un grupo pop de melodías, tenéis mucho tirón en un público más rockero. Y creo que es transmitís mucha fuerza, mucha intensidad.
Yo creo que también es por nuestra filosofía. Aunque hagamos mucha melodía, nuestra filosofía de vida es muy rock, lo que nosotros entendemos como rock, no solo musicalmente sino de vida. Y claro, si nosotros hemos estado escuchando toda la vida a Aerosmith o a Guns & Roses, da igual que tú hagas una balada, la influencia te va a acompañar siempre. Sí es verdad que en directo las canciones adquieren un nivel de potencia que para mi es rock, no necesariamente en el aspecto musical sino de filosofía, de actitud.

Ahora os vais a dar un descanso, ¿ya tienes canciones? ¿Cómo crees que será o sonará el próximo disco?
No hemos planteado nada. Ya hemos vivido la experiencia de grabar un disco detrás de otro porque los temas salían muy fácil, porque al final de la gira de “North” estábamos muy inspirados, nos sentíamos empujados a hacer “Air” muy rápidamente, nos salían las ideas con mucha facilidad. Aquello ya lo hemos vivido así que ahora nos apetece más meternos en el local, dar un guitarrazo y tirar de ese hilo. Queremos ver qué pasa si las canciones en lugar de tenerlas tan claras desde el principio las dejamos crecer y ver cómo fluyen.

Muchas gracias Nina por la entrevista y sobre todo por tus canciones.
Muchas gracias a ti, un placer.

Entrevista Javistone.
Fotos Juan Pérez-Fajardo.

Puedes ver la entrevista original publicada en el número 15 de Rock Bottom Magazine.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *